Cómo educar a un perro sordo

Los propietarios de un cachorro que sufre sordera se desesperan ante la imposibilidad de educar a un cachorro sordo.

Si bien es cierto que no es fácil, tampoco es imposible, y es muy enriquecedor para el propietario educar a un cachorro sordo cuando empieza a conseguir grandes resultados.

De hecho, son muchos los propietarios de un cachorro sordo que ignoran que lo es. Razas como el Dálmata o el Bullterrier son propensas a padecer sordera.

Educar a un perro sordo

Desde aquí lanzo el mensaje: sí es posible educar a un cachorro sordo, así que si eres propietario de uno, no te desesperes, y te invito a leer las siguientes pautas para educarlo así como para ofrecerle la mejor calidad de vida posible, dentro de sus limitaciones.

La importancia del lenguaje de signos

Al igual que los seres humanos, los perros utilizan la comunicación verbal y no verbal.

En un cachorro sordo, solo podrás utilizar la comunicación no verbal para que te entienda, esto significa, que para educarle tendrás que utilizar el lenguaje de signos asegurándote que el cachorro te mire siempre.

Utiliza la recompensa (de comida, elogios o caricias) para reforzar conductas.

Lo más frustrante para un propietario de un perro sordo es llamarle y que no acuda.

Pues bien, aprovecha otros sentidos para llamarle: puedes potenciar su sentido de la vista utilizando una señal luminosa para llamarle (una linterna de led, por ejemplo), el sentido del olfato disponiendo un alimento que huela mucho para que acuda (utiliza siempre el mismo para que relacione su nombre con ese olor) o el sentido del tacto, mediante la vibración.

La vibración es lo más aconsejable, puedes probar con las palmadas para llamarle, o bien, conseguir un collar de vibración en tu tienda de mascotas.

Aunque no es un collar barato es muy efectivo para perros sordos.

En casos de cachorros sordos, mi recomendación es conseguirle un compañero que le sirva de guía.

De esta forma, no se sentirá inseguro y podrá seguir los pasos del compañero.

Por ejemplo, si tú llamas al perro que no está sordo, el cachorro sordo le seguirá a él.

Cómo mejorar la calidad de vida del perro sordo

Un perro sordo siempre es más susceptible de sufrir accidentes que un perro sin discapacidad auditiva.

Por eso, te recomiendo que siempre que salgas a pasear lo lleves atado con correa y lo sueltes en parques o zonas acotadas donde no pueda correr el riesgo de ser atropellado.

Cómprale una camiseta o bandana en la que se pueda leer: “soy un cachorro sordo“, de esta forma, el resto de personas podrá ayudarte a controlarlo en caso de despiste o en caso de que espere alguna respuesta por su parte.

Mucho cuidado a la hora de acariciarle.

Debes acariciar a un cachorro sordo siempre de frente, nunca de espaldas. Podría asustarse, desarrollar ansiedad y miedo, y atacar para defenderse.

Fundamental colocarle en el collar un cascabel, como es común ponerle a los gatos, para saber dónde está en cada momento.

Otra de las recomendaciones es adoptar otro perro que le sirva de “guía”. Los perros sordos tienden a ser dependientes dada su discapacidad y no dudará de seguir a su compañero de aventuras.

Ten paciencia, esfuérzate en educar a un cachorro sordo y podrás vivir una de las experiencia más enriquecedoras de tu vida.

Sandra Ferrer. Creadora del Programa de Educación Canino “Cómo Educar a un Cachorro”