La educación de los perros de raza pequeña

¿Nunca te has preguntado por qué los perros de raza pequeña son los que presentan comportamientos más insolentes y consentidos?

No es porque por naturaleza los perros pequeños sean así, ni porque como se ven pequeños lo hacen para destacar o defenderse…

La razón principal es por el propietario que lo educa.

Educar a un perro de raza pequeña

Hay una tendencia generalizada de proteger más a los perros de raza pequeña. Como se ven tan frágiles y delicados, los tratamos diferente a los perros de raza grande.

También hay una tendencia absurda a cargarlos constantemente y se les permite con mayor asiduidad subir a sofás, sillones, etc.

Todas estas conductas que realiza el propietario del perro es lo que hace que, finalmente, los perros de raza pequeña sean más soberbios y altivos.

Se les consiente más y, en definitiva, se les educa de forma diferente a los perros de raza grande.

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Si tienes un perro de raza pequeña, debes intentar no cometer los siguientes errores.

Errores que debes evitar si tienes un perro de raza pequeña

No permitas ciertos derechos que a un perro grande no le permitirías.

Por ejemplo, no le cargues. ¿Cargarías a caso a un cachorro de 50 kilos?

Aunque tu perro de raza pequeña tenga 8 años y pese un kilo y medio, no tiendas a cargarlo.

Esta conducta de ir levantado y estar a un altura más alta que el resto de perros, hace que el perro interiorice un rol de liderazgo y dominancia sobre los otros perros, que le lleve a llevar relaciones insanas, de agresividad, de introversión, de hastío… además, que no le estás permitiendo hacer lo que más le gusta: moverse, gastar energía, relacionarse con su entorno, oler…

No permitas que tu perro de raza pequeña esté constantemente sobre ti en casa

Cuando compartáis sofá, sillones, camas… deja que él tenga su espacio, evita que siempre esté sobre ti.

Así como en casa, cada miembro de la familia tiene su zona en el sofá o en la cama (o incluso su propia habitación, su propio plato, etc.), el perro debe tener su propia zona y sus propios accesorios: su cojín de descanso, su cama para dormir, etc.

Es fundamental delimitar las zonas.

No consientas ciertas actitudes de humanización

Hay más tendencia a humanizar los perros de raza pequeña que los de raza grande.

Esto es debido a un problema del propio propietario de tener la necesidad de tratar al perro como a un niño pequeño porque protegerle y consentirle le hace sentir mejor, pero no por ello, el perro es más feliz.

¿Te has dado cuenta de que hay más perros de raza pequeña con vestiditos, lazos, etc. que perros de raza grande?

La educación de un perro de raza pequeña debe ser igual que la de un perro de raza grande.

Hay que educar, no consentir, y hay que respetar siempre la naturaleza del perro respetando su especie, no imponiendo los patrones de conducta de la nuestra (de hecho, debería ser al contrario, ¡tenemos tanto que aprender de los perros!), por eso, no te equivoques.

Educa con responsabilidad y con respeto y lograrás que tu perro sea feliz.

Sandra Ferrer. Creadora del Programa de Educación Canino “Cómo Educar a un Cachorro”