Educar a un cachorro a no atacar a otros animales

Al acto de perseguir y atacar animales como lagartijas, conejos, gatos, pájaros, gallinas o incluso ovejas, causándole muchas veces la muerte, se le llama agresión depredadora. La agresión depredadora suele aparecer tempranamente en los cachorros, pero ojo, no todos los cachorros desarrollan este tipo de agresión.

La agresión depredadora es provocada por la aparición de lo que el cachorro considera una presa. Este tipo de agresión es totalmente instintiva y responde a una necesidad vital de supervivencia: en sus ancestros, los cachorros aprendían desde bien pequeños a dar caza a las presas para poder alimentarse y sobrevivir en la manada.

Nuestros antepasados, seleccionaban los perros más hábiles en la caza y que, por tanto, tenían un fuerte instinto de agresividad depredadora, de ahí que hoy en día, las razas como los Terriers, los Dachshunds y las diferentes razas de perros de caza aún mantengan ese fuerte instinto depredador, y nos encontremos en muchos hogares, cachorros que en cuanto pueden matan a la gallina del vecino o nos traen una alimaña muerta a casa.

Aunque es difícil evitar esta conducta, totalmente natural en estos cachorros, debes saber que hay conductas que más vale evitar, como por ejemplo:

• Juegos de ir a buscar la pelota, peluche, disco o fresbee: aunque juguemos con él, y el cachorro se lo pase bien, este juego potencia la conducta de persecución de la presa, que en este caso es un objeto, pero que en el exterior podría ser un ser vivo. ¿No te has fijado en la conducta del cachorro cuando coge un peluche y lo sacude de un lado a otro? Es una conducta totalmente natural que no debes reñir, pero que ejemplifica a la perfección su naturaleza. A cambio de estos juegos, cambia la persecución por la búsqueda, es decir, no lances, sino esconde, y anima a tu cachorro a buscar los objetos que has escondido.
• Incitación y provocación: muchos propietarios incitan y alientan al cachorro a buscar o perseguir un gato porque éste se ha colado en el jardín. Evita este comportamiento en la medida de lo posible, ya que el cachorro trasladará esta conducta hacia una bici que pase por la calle, un coche en movimiento, una persona andando, etc.
• Falta de socialización: desde bien pequeño debes socializar a tu cachorro hacia todo lo que le rodea, incluido el hámster de casa, el gato del vecino o el pájaro que tenemos en la jaula. Cualquier conducta de agresividad hacia estos animales debes cortarla con un NO y la obligación de sentarlo.
• Nunca le des carne cruda o fresca, porque va a querer buscarla fuera de casa.

Si has observado que tu cachorro tiene un fuerte instinto de agresividad depredadora te recomiendo, por una parte, que lo entrenes y lo eduques, y por otra, que lo lleves al veterinario.

La educación es fundamental y el entrenamiento aún más. Entrena a tu cachorro, con la ayuda de una segunda persona, poniéndole a su alcance una posible presa. En cuanto veas que tu cachorro se dispone a atacar, bloquea esa conducta obligándole a sentarse. Primero utiliza una correa, y con el tiempo, utiliza tu voz y tu energía.

Llévalo al veterinario y explícale el caso. En cachorros que tienen muy marcado el instinto y que con el entrenamiento no basta, el veterinario podrá administrar medicación para paliar este problema.

Sandra Ferrer.
Creadora del Programa de Educación Canino “Cómo Educar a un Cachorro”