Y decimos genuina, porque la fisionomía del Bull Terrier lo hace único: es fácil de reconocer por su cabeza y ojos pequeños triangulares.
Esta simpática raza se originó por el cruce de diferentes razas.
Primero con el Bulldog y el Viejo Terrier Inglés.
También con la unión del Pointer Español, Dálmata y el Terrier Inglés blanco.
Estos últimos, lograron que se originara un perro fuerte pero al mismo tiempo, elegante.
La primera vez que se creó la raza fue en el siglo XIX, gracias a James Hinks. Por él, fue que se conoció por primera vez al Bull Terrier.
También existe el Bull terrier miniatura. Este se desarrolló mucho después, al hacer diferentes cruces de otras razas, con el Bull Terrier Inglés.
Dato curioso: A mediados del siglo XIX, se prohibieron las peleas de toro en Gran Bretaña.
A raíz de eso, en busca de continuar las peleas y tomar el lugar de los toros, se inició el cruce de las razas.
El objetivo era crear una raza capaz de pelear. Por lo tanto, debía de ser una raza fuerte y también robusta.
Características físicas del Bull Terrier
Una de las características físicas del Bull Terrier que no puede pasar desapercibida, como hemos comentado al inicio, es su cabeza.
Esta tiene una forma diferente y peculiar.
Se podría decir, como muchos la describen, que su cabeza es parecida a un huevo. Además, en la parte superior, es plana.
Sus ojos también son muy característicos al ser pequeños, muy cercanos y oscuros.
Su cuerpo en general es grande, pero su dorso es corto. Sin embargo, es un perro muy fuerte.
- Tamaño y peso:
El Bull Terrier adulto puede llegar a medir entre 35 y 50 cm. Sin importar si es macho o hembra. Ambos son iguales.
En cuanto a su peso, pueden llegar a pesar entre 20 y 40 kilos.
Lo mismo ocurre con el tamaño de los Bull Terrier miniatura. Ambos miden menos de 35,5 cm.
- Color y tipo del pelaje:
El pelaje es blanco, pero muchos perros tienen marcas negras y otros atigrados, tricolores y leonados.
Es importante reconocer cuando un Bull Terrier es totalmente puro.
Por ello, cuando tienen colores marrón o azulado, no son admitidos en el estándar oficial de la raza.
En cuanto a su tipo de pelo, es una raza que tiene el pelo corto y liso, pero al tocarlo es un poco duro.
Cuando llega el invierno su pelaje cambia y le sale una capa de su pelo suave.
- Color de los ojos:
Cuando el Bull Terrier tiene los ojos de color azul, tampoco es reconocido en el estándar oficial; así como ocurre con el pelaje.
La raza debe tener los ojos oscuros. Mientras más oscuros, mejor. Pueden ser de ojos marrones o negros.
Temperamento del Bull Terrier
El Bull Terrier tiene un buen carácter.
Son juguetones, cariñosos, leales y muy protectores con su familia.
Por supuesto, aunque su carácter es bueno, siempre es importante la educación desde temprana edad.
Lo más común en esta raza, es que sean de carácter equilibrado.
Son perros considerados muy amables, valientes, activos y apegados a sus adoptantes.
Todo esto, según el estándar de la raza.
Con otras personas, tienden a ser cariñosos y juguetones.
No es extraño verlos saltando para pedir atención de los extraños, pero también son un poco tímidos y miedosos con las personas que no conocen.
Esta raza disfruta de la compañía de su adoptante, por lo tanto, es una raza que necesita atención constante.
Si se sienten muy solos y también estresados, pueden causar algunos daños en su hogar; así como morder o destruir algo.
El Bull Terrier, a grandes rasgos, es:
- Juguetón:
Es un perro que le gusta el juego, pero no todo el tiempo.
Recordemos que es un perro con mucha energía y el juego debe ser parte de su rutina. Debe ser parte de su ejercicio.
- Un poco inquietos:
El Bull Terrier es una raza con mucha energía. Siempre quieren y deben estar en constante movimiento, por lo tanto, rara vez se verán tranquilos.
Por todo esto, es que necesitan un adoptante enfocado 100% en ellos para garantizar su bienestar general.
- Apegados a su adoptante:
Está raza tiende a ser muy apegada con sus adoptantes, incluso pueden llegar a ser un poco obsesivos.
Se recomienda que desde pequeños, durante su proceso de educación, se les enseñe a tener autonomía.
Para ello, se debe procurar que pasen tiempo sin sus adoptantes, periodos cortos y poco a poco.
Todo esto ayudará a que el perro no sienta ansiedad de separación.
Comportamiento del Bull Terrier
- Ladran mucho:
A esta raza le gusta la atención y podrá ladrar lo que sea necesario hasta lograr lo que quiere.
- Destructor ante la soledad
Como hemos mencionado, no les gusta estar solos, por eso, pueden llegar a ser destructivos al estar en casa sin ninguna compañía.
Es de suma importancia la educación, para evitar el apego excesivo con su adoptante. Solo así, podrán tolerar estar solos algunas horas y sin consecuencias para ellos ni para el hogar.
Cuidados básicos que necesita
- Ejercicio todos los días:
Esta raza requiere de actividad física constante, debido a que es un perro muy activo y con mucha fuerza física. Necesitan de juegos, ejercicio y diversión al mismo tiempo.
- Cepillado poco frecuente:
El pelaje del Bull Terrier no requiere de cuidados especiales, pero sí debe ser cepillado con regularidad. Mudan el pelaje dos veces al año.
- Climas fríos:
Si llega el invierno, es importante que el adoptante tome algunas precauciones para protegerlo del frío.
Su pelaje no lo protege correctamente en épocas frías.
Es recomendable ponerle alguna prenda que le dé calor, sobre todo durante los paseos diarios.
- Baño mensual:
Esta raza no requiere de baños frecuentes.
Con bañarlos una vez al mes es suficiente, usando productos adecuados para su piel y pelaje.
Antes del baño, siempre se recomienda cepillarlo. Esto con el fin de eliminar el pelaje muerto correctamente y que el baño sea más completo.
- Limpiar sus oídos:
Es importante limpiar los oídos del Bull Terrier semanalmente, de esta manera, se previene algún tipo de infección y se mantienen limpios todo el tiempo.
Por supuesto, debe hacerse con el accesorio adecuado.
- Cuidado de sus uñas:
Normalmente, durante los paseos, las uñas deberían desgastarse, pero otras veces no es así; y por eso el adoptante debe estar atento para mantenerlas cortas.
Existen en el mercado algunos cortadores especiales para ello.
Alimentación
Para los perros Bull Terrier, lo más recomendable es elegir pienso seco.
Es mejor evitar los que tienen azúcar, puesto a que esta raza tiene tendencia a ganar peso.
Para saber la cantidad de comida que el perro necesita, lo mejor es consultar con el veterinario, sin embargo, la cantidad depende de su edad.
Por ejemplo, cuando son cachorros comen más veces, es decir, tres veces cada día, pero a medida que crecen y se convierten en adultos, se les alimenta solo dos veces cada día.
Esta vez, con pienso especial para perros adultos. No obstante, es recomendable consultar la cantidad exacta con el especialista para no darles poco o demasiado.
Sin duda alguna, hay muchas opciones que el adoptante puede escoger para alimentar a un Bull Terrier, pero siempre asegurándose de ofrecerle al perro una alimentación equilibrada.
Una buena alimentación hará que el Bull Terrier crezca sano y cuidará su aspecto.
Problemas de salud
Un Bull Terrier sano puede vivir sin problemas entre 10 y 12 años.
Cuando el adoptante implementa los cuidados necesarios que el perro necesita desde que es un cachorro, eso ayudará a que su adultez y vejez sean mucho más sanas.
Es importante conocer que, aunque esta raza es muy sana, es propensa a padecer algunas enfermedades.
- Sordera:
Un porcentaje bajo de perros de esta raza, nacen con problemas en sus oídos. Aproximadamente un 18%.
Lo más común es que sea algo hereditario. En cuanto a las posibilidades de que ocurra, es más frecuente en los perros que son blancos.
Cunado esta raza presenta sordera, puede que afecte a ambos oídos, o solo a uno.
Y aunque es una enfermedad que no les impide seguir con su vida, es importante diagnosticarla para brindarle la mejor calidad de vida posible al perro que la padezca.
En este artículo hablo sobre cómo educar a un perro con sordera.
- Problemas cardíacos:
Los problemas más comunes de esta raza, son la estenosis aórtica y la displasia de la válvula mitral.
En ambos, se pueden tratar con algún tratamiento que emita el médico veterinario, sin embargo, en estos casos, la alimentación juega un papel muy importante.
- Problemas en los ojos:
Lo más común en esta raza, sobre todo en los Terrier Miniatura, es que se ven afectados por una luxación primaria del cristalino.
Esto es el rompimiento de los ligamentos que mantienen al ojo en su lugar.
- La acrodermatitis letal:
Se trata de una enfermedad hereditaria, y puede ser leve o grave.
Esta enfermedad solo afecta a los perros de esta raza, es decir, al Bull Terrier y al Bull Terrier Miniatura.
Cuando los perros la tienen y es grave, lo más habitual es que el perro sea sacrificado.
Cuando un cachorro está afectado, su crecimiento se ve afectado.
También desarrollan patas infectadas, su piel se pone de color rojo y escamosa.
Los perros que se ven afectados con esta difícil enfermedad, presentan yagas que duelen mucho y normalmente mueren muy jóvenes, antes de tener los dos años de vida.
Cuando la enfermedad es leve, el perro puede tener su vida lo más normal posible, siempre bajo la supervisión del médico veterinario.
Al mismo tiempo, se le debe proporcionar al perro una dieta natural en su totalidad. Debe ser una dieta líquida.
Otras enfermedades comunes del Bull Terrier son:
- Problemas renales.
- Alergias.
- Patologías cutáneas.
- Epilepsia.
- trastornos obsesivo-compulsivos.
- Displasia de cadera.
- Son sensibles a las picaduras de insectos.
Proceso de educación del Bull terrier
Educar a los perros de esta raza, no solo requiere de mucho tiempo y dedicación de su adoptante, sino también de mucha paciencia y tolerancia.
El perro puede ser un poco terco y esto evitará que se concentre.
Es recomendable que los momentos de entrenamiento sean cortos.
Nada que pueda sobresaturarlo.
Lo mejor es que sean varias sesiones de entrenamiento durante el día con el mismo objetivo, que una sesión larga y estresante para la mascota.
Es mejor ir poco a poco y con calma para que el perro logre aprender bien cada orden u objetivo que se quiere alcanzar.
Para conseguir la atención del perro durante su entrenamiento es necesario que el adoptante se muestre firme, pero con paciencia.
De lo contrario, puede provocar que el perro no aprenda nada y se ponga agresivo. Con mucha paciencia y constancia se lograrán los resultados que se esperan.
Nota: Muchos han catalogado a esta raza como un perro peligroso, pero mucho depende de la educación y socialización que se le dé.
Por este motivo no es un perro apto para principiantes. Debe ser un adoptante capaz de educarlo con tiempo, amor y constancia.
Bull terrier y los niños
Son perros muy fuertes. Esto no significa que no puedan estar con niños, pero nunca se deben dejar solos con ellos.
Siempre con la supervisión de un adulto.
El Bull Terrier es un perro muy equilibrado. También les gusta jugar, pero pueden llegar a ser un poco violentos al hacerlo.
No obstante, siempre es importante tomar en cuenta que la educación desde cachorros es de gran importancia para que el perro pueda socializar con niños, demás personas, e incluso con otros animales.
El Bull terrier es un perro guardián
Aunque es un perro que se muestra amistoso con personas que no conoce, puede fácilmente ser un perro muy protector, por ello, es también considerado un perro guardián.
El Bull Terrier es capaz de reconocer cuándo una persona es invitada, o cuándo no lo es.
Además, es una raza que muchos consideran peligrosa y eso hará que muchos se mantengan alegados por precaución.
Por tanto, con solo su presencia, el adoptante y su familia se sentirán más protegidos.
Sandra Ferrer. Creadora del Programa de Educación Canino “Cómo Educar a un Cachorro”
