Un acto tan sencillo y automático como puede ser recoger las cacas del perro se vuelve tarea casi imposible para muchos propietarios.
Hay quienes tienen plena conciencia de que hay que ser cívico y sobretodo limpio, pero otros aplican aquello de que “como otros no recogen, yo tampoco”, y así están nuestras calles, llenas de excrementos caninos que son un auténtico peligro para los humanos.
Esas mismas personas que no recogen las cacas, luego son las que más demandan más derechos para sus perros…
Quizás después de leer esto empiecen a recoger los regalitos de nuestros peludos.
¡Recoge la caca de tu perro!
Ya no es cuestión de que encontrarse cacas sea poco o nada estético, sea una guarrada o sea repugnante, sino que entraña un peligro considerable para la salud de los humanos.
Para que te hagas una idea: un solo gramo de caca de perro tiene unos 23 millones de bacterias.
Parece imposible imaginar que tantas bacterias quepan en un solo gramo de excremento, ¿verdad?
De hecho, un estudio realizado en Estados Unidos comprobó cómo entre el 20 y el 30% de los residuos que hay en las aguas urbanas vienen de los excrementos de perros y entre el 10 y el 50% de las bacterias que pululan en el aire de cuatro estados del país venían de la misma fuente: las cacas (cuando las cacas se secan se convierten en polvo que fácilmente podemos respirar).
¿Cómo te quedas? ¿Preocupad@? Pues deberías, ya que no recoger las cacas de los perros es un peligro que puede causar estragos en nuestra salud debido a zoonosis (se dice de cualquier enfermedad propia de los animales que incidentalmente puede comunicarse a las personas).
Las más comunes: fiebre tifoidea, salmonelosis, hepatitis A, leptospirosis, etc., que son fácilmente ingeribles por nosotros a través de huevos, larvas, gusanos, que a simple vista no vemos pero que están ahí.
Es tan fácil como pisar un excremento de perro, llegar a casa, quitarnos los zapatos, que caigan partículas en casa, que juguemos con el perro que ha estado en contacto con ese zapato o suelo, y … sucede.
Por tanto, ¡concienciación!,¡sensibilización! Si todos los propietarios de perros recogiéramos las cacas de nuestros peludos, las probabilidades de que ingiriéramos partículas de heces sería ínfima.
¿Nos ponemos todos de acuerdo para recoger las cacas de nuestros perros?
Espero que sí, porque solo demostrando a la sociedad que somos responsables de nuestros perros, podremos entonces reclamar un mejor sitio para ellos.
¡Ya es hora de que maduremos como sociedad!
Sandra Ferrer. Creadora del Programa de Educación Canino “Cómo Educar a un Cachorro”