Una de las razas de perro que se reconoce con mayor facilidad sobre las demás es el Dálmata, debido a que son muy populares y llamativos por su aspecto blanco con manchas de color negro, que sin duda resaltan sobre todos los demás.
Cada patrón es único e irrepetible, es como una huella dactilar que identifica a cada individuo, es decir, que no hay dos perros de esta raza que sean iguales.
Su carácter es muy dócil y posee una personalidad muy estable y de comportamiento tranquilo, aunque hay que tener en cuenta que para mantener su equilibro mental debe realizar una cantidad de ejercicio considerable al día para liberar las tensiones y equilibrar la energía que llegan a acumular.
Por lo tanto, si eres el afortunado adoptante de esta raza te interesará saber más de ellos.
O si tienes entre tus planes adoptar a uno, conoceremos su historia, sus características, cómo cuidarlo y mucho más.
Origen del dálmata
Los orígenes exactos del dálmata no se conocen con precisión, y al respecto, se han desarrollado varias teorías basadas en especulaciones.
Algunas dicen que los primeros ejemplares se originaron el Dalmacia, en las costas croatas, mientras que otras especulan que su origen se remonta a diversas regiones como Italia, Egipto, y también se menciona a Turquía.
Existen ilustraciones que fueron realizadas por los griegos, e incluso hay pinturas en tumbas de faraones que dan indicios de la existencia de esta raza desde hace más de 1500 años.
Aunque no arrojan ninguna pista de qué papel cumplían en la comunidad, o qué trabajos realizaban, y mucho menos el origen de su nombre.
Sin embargo, también existen obras históricas antiguas en las que los dálmatas son categorizados como perros turcos, perro dálmata, pequeños daneses, perro tigre o blanco de bengala.
Todo eso permite demostrar que su característica de doble coloración manchada ya se encontraba presente en los años de la Edad Media.
Se piensa que los Dálmatas son descendientes de los Pointer, obteniendo su nombre de origen de la región de Dalmacia, que perteneció a la zona costera de Austria que hoy en día es parte de Croacia.
Además, al parecer, era un perro muy popular entre la alta sociedad europea de la nobleza, la cual estaba difundida en su mayor extensión a partir de finales de esa época.
Por otro lado, se conoce que, en Inglaterra, debido a su talla y porte, era empleado como un escolta que protegía a los pasajeros de los carruajes.
Mientras tanto, en los Estados Unidos, se popularizó como un gran compañero de los bomberos, al correr por delante del camión a la vez que ladraba a manera de sirena para despejar el camino.
Esto con el fin de que el cuerpo de bomberos tuviera vía libre y pudiese llegar más rápidamente a su destino.
Hoy en día aún sigue siendo un compañero de algunas centrales de bomberos.
Los dálmatas también han prestado servicios militares en las guerras y han sido artistas de circo.
Debido a su complexión y fortaleza muscular, también han sido compañeros de cacería, aunque en la actualidad se desempeñan principalmente como mascotas de compañía.
Características físicas del dálmata
Los dálmatas tienen una maciza complexión física, lo que los hace muy fuertes, dando la impresión de que no les cuesta para nada hacer sus movimientos, pareciendo que se desplazan sin dificultad y con mucha gracia.
Fisonomía del dálmata
- Cabeza: El tamaño de su cabeza es grande, pero manteniendo la proporción respecto al resto de su cuerpo, lo que lo hace muy atractivo a la vista, además de que posee unas extremidades bastante largas.
- Nariz, ojos, orejas y cola: Su nariz es oscura y sus ojos suelen ser de color ámbar. Sus orejas son de tamaño medio que caen dobladas por ambos lados de su cráneo. En cuanto a su cola, esta es larga y musculosa y generalmente la lleva levantada a una altura media.
- Tamaño y peso: El tamaño de los perros de esta raza varía entre el mediano a grande, estando el tamaño promedio entre los 50 y 60 centímetros de altura hasta la cruz. Son de gran tamaño muy bien proporcionado y cuentan con una musculatura poderosa y abundante, lo que lo hace muy fuerte sin perder agilidad ni su elasticidad. Respecto a su peso, este puede variar entre los 25 y 32 kilogramos, manteniéndose proporcionados respecto a la estatura.
- Pelaje y color: El pelo que cubre la piel del dálmata es áspero al tacto, y presenta unas características duras y cortas, pero no deja de ser brillante. Siempre está mudando el pelo, por lo que encontrarás con facilidad restos en cada rincón de tu hogar, lo que no resulta muy conveniente para las personas asmáticas y / o alérgicas.
En cuanto a la coloración, la base será siempre de color blanco con presencia de manchas únicas de diversas formas y tamaños distribuidas a lo largo de todo su cuerpo.
Estas generalmente son negras, aunque hay algunos individuos que presentan una coloración café sobre el fondo blanco.
El estándar establecido indica que el moteado deberá ser equilibrado y simétrico, aunque ninguna de las manchas sea igual entre sí, y sin exceder estas más de los 3 centímetros de diámetro.
En su cabeza y cola las manchas serán más pequeñas y tendrán menor presencia que en el resto del cuerpo.
Como dato curioso del dálmata: en el momento de nacer, presentan un pelaje completamente blanco. Luego, con el paso de los meses, durante el primer año de vida, van desarrollando las manchas negras características de la raza.
Nota: Debido a sus características, el dálmata es un animal que es capaz de alcanzar una velocidad considerable para correr.
Es un perro que, debido a su contextura y fortaleza muscular, requiere una cantidad considerable de ejercicio físico diario para poder mantener un adecuado equilibrio energético saludable en todo momento.
Personalidad del dálmata
Los dálmatas son perros ideales para las familias, debido que son muy fieles y se comportan de manera excelente en la presencia de niños.
- Disfrutan de los juegos:
Les encanta mucho jugar, aunque su carácter enérgico puede ser contraindicado si hay presencia de niños muy pequeños.
Por este motivo, siempre es necesario que un adulto responsable esté supervisando en todo momento para evitar accidentes que podrían ocurrir sin ningún tipo de mala intención.
Esto aplica en cualquier raza sin importar que tan dócil o amigable sea el perro.
Si les gusta mucho divertirse, podrían lastimar a los niños al solo querer jugar con ellos.
- Reservados y cautelosos:
Algunos ejemplares pueden mostrar un comportamiento cauto y reservado con los extraños.
Y cuando se trata de otros perros, pueden llegar a resultar agresivos, lo que los hace ideales para resguardar el hogar.
- Tímidos:
Otros son de carácter más bien tímido y no socializan de manera adecuada, llegando a mostrarse incluso nerviosos.
Tienen una excelente memoria que hace que recuerden cualquier eventualidad durante muchos años, por lo que hay que tratarlos siempre con cariño y delicadeza en todo momento.
Temperamento del dálmata
El comportamiento de cada perro dálmata en particular es forjado por diversos factores como los antecedentes genéticos, el ambiente en el que hacen su vida diaria y la forma en la que son tratados.
Es por esta razón que se podrán escuchar diversas opiniones de las personas que van desde las descripciones de perro educado y afectuoso, hasta otros que opinan que son perros muy nerviosos que llegan a mostrar comportamientos agresivos.
Por todo esto, hay que ofrecerles la oportunidad de socializar desde que son cachorros y al mismo tiempo una correcta educación para lograr un balance positivo en su forma de comportarse.
Siempre hay permitirles que se puedan ejercitar bastante ya que esto permite lograr la estabilidad de su psique al manejar y canalizar de forma positiva su carácter enérgico.
Cuidados en la salud del dálmata
Presentan algunas afecciones de origen genético como hiperuricemia o la predisposición a presentar o desarrollar sordera.
De la misma forma pueden llegar a desarrollar y mostrar reacciones alérgicas en la piel y alergias de tipo alimentaria, así como desarrollar cálculos renales y uretrales.
Estas predisposiciones hay que considerarlas debido a que hay que llevar al perro a revisión con el veterinario de manera regular para descartar y/o controlar a tiempo cualquier problema que pueda manifestarse.
Sordera
Es una afección que suelen sufrir los cachorros de los dálmatas en una mayor proporción que otras razas de perros.
Y esta está asociada a su pelaje blanco, según las investigaciones realizadas. Esta se puede llegar a presentar en más del 10% de los cachorros.
Sin embargo, no se ha logrado desarrollar una prueba inefable que relacione la predisposición a la sordera de estos animales con su combinación genética.
Es por ello que se pueden obtener cachorros que sufran este padecimiento de padres con su sistema auditivo totalmente sano.
Para poder verificar esto en el cachorro, hay que recurrir directamente al médico veterinario tan pronto nazca el perrito para que pueda realizarle las pruebas correspondientes.
Cálculos urinarios
Otra de las afecciones que aquejan a los perros dálmatas es la alteración del sistema de transporte del ácido úrico, el cual es originado por un defectuoso sistema metabólico por causas genéticas.
Esto lleva al perro a padecer de cálculos renales y/o urinarios desde temprana edad.
No obstante, llevando una alimentación controlada y balanceada, se puede llegar a reducir el riesgo de la aparición de estos cálculos.
Sin embargo, aunque esta raza suele presentar un nivel elevado de ácido úrico en su orina, no todos los ejemplares llegan a desarrollar esta patología.
Nota: Cuando se cría una raza de perros como los dálmatas que suele estar relacionada a ciertos problemas de salud de orden genético, hay que prestar especial atención a los procesos de crianza.
Esto con el objetivo de poder controlar la salud de los animales desde pequeños y así minimizar o evitar del todo los posibles problemas que puedan desarrollar a lo largo de su vida.
Educación de la raza
Es una raza de perros que dispone de una gran inteligencia y quizás por esto también tienen una tendencia innata a ser tercos y obstinados.
Por ello, algunos ejemplares pueden llegar a ser un poco difíciles de educar.
Ello se debe a que son muy independientes y tienden a hacer las cosas a su manera, tratando de inducir a los demás que también lo hagan de esa forma.
En este sentido, los adoptantes deben estar dispuestos a tener constancia y paciencia para dedicarle el tiempo necesario para enseñar a su perro.
Además, recibirán mejor sus lecciones si se utiliza una metodología de entrenamiento positivo en el que se le otorgan recompensas por los comportamientos adecuados.
Educación desde que son cachorros
Resulta importante iniciar su educación desde que son cachorros y acostumbrarlos a la socialización desde etapas tempranas de su desarrollo.
De esta manera aprenderá a comportarse adecuadamente frente a personas desconocidas y otros perros, así como a reaccionar de manera adecuada a las diversas situaciones que se le puedan presentar.
La educación del cachorro debe comenzar a partir de los 3 meses con la socialización, al presentarle personas y otros perros y animales comunes del entorno en el que se desarrollará.
Así se podrá familiarizar y se evitará que desarrolle comportamientos y actitudes agresivas hacia ellos.
Eventualmente se le enseñarán juegos y cómo y dónde hacer sus necesidades y otras normas básicas.
A todo este proceso se le puede dedicar un tiempo entre 5 y 10 minutos al día.
Nota: Según el listado de la escala de inteligencia de las diversas razas de perros elaborada por Stanley Cohen, el Dálmata se encuentra en la posición número 39.
Aunque, como mencionamos, muchas personas y adiestradores lleguen a considerarlo un animal terco, resulta que tiene una excelente disposición al aprendizaje cuando se emplean métodos de refuerzos positivos.
Junto al adiestramiento será excelente emplear entrenamiento de tipo físico para complementar su estabilidad y salud mental.
Sandra Ferrer. Creadora del Programa de Educación Canino “Cómo Educar a un Cachorro”