Muchos propietarios no son conscientes del daño que causa el sol en sus perros, porque desconocen ciertas partes del cuerpo muy expuestas que se dañan sin que el propietario se dé cuenta. Es por eso, que hoy quiero dedicar este post a concienciar a los propietarios de perros sobre varias pautas que deben seguir para evitar los estragos del sol y las altas temperaturas.
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- Jamás realizar los paseos en horas de máximo calor. Durante el verano, las temperaturas pueden llegar fácilmente a los 40 grados, y en olas de calor alcanzar los 50 grados de temperatura. Con una panorama así es de locos salir a la calle, ¿verdad? Pues si unes a eso que nuestros perros llevan abrigo, van descalzos y que no sudan, imagínate la sensación… Por eso, siempre debes iniciar el paseo de muy buena mañana, cuando recién salga el sol y a última hora de la tarde. Solamente así, tu perro podrá soportar levemente el calor.
- Las almohadillas de las patas, las grandes olvidadas. Vale que el perro tenga callo en las almohadillas, sin embargo, eso no es excusa para que pueda salir en horas de máximo calor sobre un asfalto hirviendo. El perro va literalmente descalzo, por lo que las almohadillas pueden dañarse fácilmente, con el dolor que eso produce. Para evitar daños en las almohadillas, nada mejor que poner tu mano sobre el asfalto. Si eres capaz de no levantar la mano durante 5 segundos, tu perro puede caminar sobre el mismo, sin embargo, si la levantas no obligues a tu perro a andar sobre él. Y para cuidarlas y mantenerlas hidratadas, nada mejor que un bálsamo.
- Benditas sombras. El perro jamás debe quedarse al sol por largos minutos. Hay gente que ata a su perro a un poste mientras hace la compra ¡al sol! O deja encerrado a su perro en el balcón, ¡sin ninguna sombra! Siempre hay que buscar cobijo bajo cualquier sombra, por eso, si necesitas dejar a tu perro en casa en el jardín o en el patio, no olvides nunca proveerle de un sitio con sombra, teniendo en cuenta que el sol se desplaza y la sombra también. Estudia esto, porque puede que cuando vuelvas a por tu perro éste ya no viva. El sol y las altas temperaturas son un asesino veloz.
- El coche, una trampa mortal. Hay numerosas campañas sobre los golpes de calor en el coche, sin embargo, aún me encuentro a perros encerrados en el coche esperando a su dueño con un calor abrasador. Si ése es tu caso, si te encuentras a cualquier perro dentro de un coche muerto de calor, no dudes en llamar la policía. Podrías salvarle la vida, pues muchos perros no duran más de 10 minutos dentro de un coche a una temperatura de más de 30 grados. En tu caso, jamás dejes a un perro solo dentro de un coche.
- Protección solar. Si tu perro es de los que te acompaña allá donde vayas, y soléis navegar juntos, ir a la playa juntos, etc. estando tu perro muy expuesto a los rayos solares, no olvides varias consideraciones como protegerle del sol. ¿Cómo? Con gafas de sol para perros, con crema solar para perros, con ropa de verano, etc.
- La nariz, la gran perjudicada.Y es que está ahí siempre, expuesta a los rayos UVA pudiendo resecarla, agrietarla y dañarla. Por eso, nada mejor que un bálsamo protector para mantenerla hidratada y protegida del sol. ¿El mejor? Un poco de vaselina.
- ¡No rapes el pelo de tu perro en verano! Una cosa es cortar las puntas para deshacerse un poco de ese manto, y otra cosa es rapar y dejar solo un poquito de pelo. El pelo del perro sirve de abrigo pero también ayuda a protegerle de los rayos del sol, así que si acudes a la peluquería que solo sea para hacerle las puntas, pero no lo rapes, porque los rayos del sol podrían perjudicar su piel.
Como ves, el verano tiene muchas cosas buenas, pero para nuestros perros no es que sea la mejor época del año, por tanto, para ayudar a que pase la temporada de la mejor manera posible, no descuides estos consejos.
Sandra Ferrer. Creadora del Programa de Educación Canino “Cómo Educar a un Cachorro”
