El atragantamiento en perros es una emergencia que puede surgir inesperadamente, convirtiéndose en una situación angustiante tanto para el perro como para su adoptante.
Aún recuerdo cómo mi anterior perro nos robó una albóndiga y con el ansia de que se la quitáramos se la tragó quedándose parada en el esófago, que no iba ni para adelante ni para atrás.
Cuando vi al perro inmóvil, intentando gritar sin poder… Me abalancé sobre él para golpearle el torso, cogerle por las patas traseras y sacudirlo hacia abajo… Hasta que la albóndiga salió.
Fueron unos pocos minutos pero fueron eternos…
La prevención y el conocimiento sobre cómo actuar ante estos casos pueden ser vitales para la salud y seguridad de nuestros compañeros caninos.
Hoy vamos a profundizar sobre el atragantamiento en perros, la frecuencia de estas emergencias en consultas veterinarias, sus causas, cómo prevenirlas, y los pasos a seguir si te enfrentas a un caso de atragantamiento en tu perro (que esperemos que nunca pase).
¿Qué tan común es el atragantamiento en perros?
El atragantamiento no es un evento cotidiano en la vida de un perro, pero ciertamente es una emergencia que los veterinarios encuentran con una frecuencia moderada.
Los perros son exploradores por naturaleza y tienden a investigar su entorno con la boca, lo que incrementa el riesgo de ingerir objetos no comestibles o trozos de comida demasiado grandes que pueden causar obstrucción de las vías respiratorias (como las malditas albóndigas).
Aunque no hay estadísticas precisas que determinen la frecuencia exacta de estos incidentes, se sabe que es una causa común de visitas de emergencia al veterinario.
Señales de que tu perro se está atragantando: síntomas
Reconocer las señales de que un perro se está atragantando es crucial para poder actuar rápidamente y brindar la ayuda necesaria.
Observa estas señales o síntomas de atragantamiento en perros:
- Dificultad para respirar o jadeo excesivo: El perro parece luchar por respirar o no puede inhalar o exhalar normalmente.
- Tos fuerte e ineficaz: Un perro que intenta desalojar un objeto de su garganta puede toser repetidamente de manera fuerte pero sin éxito.
- Salivación excesiva o espuma en la boca: La obstrucción de las vías respiratorias puede provocar una producción excesiva de saliva o la aparición de espuma en la boca.
- Intentos de vomitar sin expulsar nada: El perro puede hacer gestos como si estuviera tratando de vomitar, pero sin expulsar comida o líquido.
- Agitación o pánico: Un perro que se está atragantando puede mostrar signos de nerviosismo, inquietud o incluso pánico debido a la incomodidad y la incapacidad para respirar.
- Rascarse o golpearse la boca: El perro puede intentar desalojar el objeto atrapado utilizando sus patas, rascándose la boca o golpeándose contra objetos.
- Encías y lengua azuladas o pálidas: La falta de oxígeno puede causar que las encías y la lengua del perro cambien a un color azulado o pálido.
- Pérdida de conocimiento: En casos severos, el perro puede desmayarse o perder la conciencia debido a la falta de oxígeno.
Si observas alguna de estas señales en tu perro, es importante actuar de inmediato.
Evalúa la situación con calma pero rápidamente, y si es seguro hacerlo, intenta revisar la boca del perro para ver si puedes identificar y retirar el objeto causante.
En caso de duda o si no puedes desalojar el objeto de manera segura, busca atención veterinaria de emergencia lo antes posible.
Causas comunes del atragantamiento
El atragantamiento puede ocurrir por varias razones, entre las más comunes se encuentran:
- Ingesta de objetos pequeños: Los perros pueden atragantarse con juguetes, huesos, piedras, o cualquier objeto pequeño que quepa en su boca.
- Alimentos de tamaño inadecuado: Trozos grandes de comida o huesos pueden quedarse atorados en la garganta.
- Juguetes inapropiados: Juguetes que se deshacen fácilmente o que son demasiado pequeños para el tamaño del perro representan un riesgo de atragantamiento.
- Actividad mientras comen: Correr o jugar inmediatamente después de comer puede aumentar el riesgo de atragantamiento.
Cómo evitar el atragantamiento
Prevenir el atragantamiento es crucial para evitar emergencias.
Algunas medidas preventivas que es importante tener en cuenta:
- Selección cuidadosa de juguetes y objetos: Elige juguetes adecuados para el tamaño y la fuerza de tu perro. Evita juguetes que se puedan deshacer en piezas pequeñas. En este sentido, huye de los juguetes de bazares y apuesta por juguetes de calidad.
- Supervisión durante las comidas: Mantén un ojo en tu perro mientras come, especialmente si se le ofrecen huesos o trozos grandes de comida.
- Entrenamiento para dejar o soltar objetos: Enseñar a tu perro comandos como “deja” o “suelta” puede ser muy útil para prevenir que ingiera objetos potencialmente peligrosos.
- Almacenamiento seguro de objetos pequeños: Mantén objetos pequeños, como juguetes para niños y calcetines, fuera del alcance de tu perro.
Qué hacer ante un atragantamiento
Si sospechas que tu perro se está atragantando, es importante actuar con rapidez pero manteniendo la calma.
Sé por experiencia que mantener la calma es lo que más cuesta, pero créeme que de esta forma es como conseguirás un ambiente más calmado.
Sigue estos pasos:
- Evalúa la situación: Observa si tu perro puede respirar o toser. Si puede toser, es posible que pueda expulsar el objeto por sí mismo. Mantén la calma y monitorea de cerca.
- Abrir la boca del perro con cuidado: Si el perro no puede respirar, intenta abrir su boca cuidadosamente para ver si el objeto está a la vista y si puedes retirarlo sin empujarlo más adentro. Utiliza tus dedos o unas pinzas para intentar retirar el objeto, pero solo si puedes verlo claramente.
- Maniobra de Heimlich para perros: Si no puedes retirar el objeto y tu perro está consciente, colócate detrás de él, coloca tus brazos alrededor de su abdomen, justo debajo de las costillas, y aplica una rápida presión hacia arriba y hacia adentro. Si el perro está inconsciente, colócalo de lado y aplica presión sobre el abdomen, empujando hacia arriba.
- Reanimación cardiopulmonar (RCP): Si el perro no muestra signos de respiración o pulso después de retirar el objeto, puede ser necesario realizar RCP mientras alguien más busca ayuda veterinaria.
- Visita al veterinario: Incluso si logras retirar el objeto y tu perro parece estar bien, es crucial visitar al veterinario lo antes posible. El atragantamiento puede causar lesiones internas que no son inmediatamente aparentes.
Cómo realizar la maniobra de Heimlich en un perro paso a paso
Como he comentado, la maniobra de Heimlich es un procedimiento de emergencia que puede salvar la vida de un perro en caso de atragantamiento.
Estos son los pasos que debes seguir en caso que tu perro lo requiera:
- Identifica si el perro se está atragantando: El primer paso es confirmar que el perro realmente necesita esta intervención. Los signos de atragantamiento, como he comentado, incluyen dificultad para respirar, tos ineficaz, salivación excesiva, ansiedad, y posiblemente coloración azulada de la lengua y las encías debido a la falta de oxígeno.
- Calma al perro y colócate detrás de él: Es importante tranquilizar al perro lo mejor que puedas. Si es posible, colócate detrás del perro. Si el perro es pequeño, puedes levantarlo y sostenerlo con tus brazos.
- Ubica tus manos correctamente: Coloca tus brazos alrededor del abdomen del perro, justo debajo de las costillas. Haz un puño con una mano y colócalo justo debajo del diafragma del perro, cubriendo tu puño con la otra mano.
- Realiza compresiones abdominales: Empuja hacia adentro y hacia arriba en un movimiento firme y rápido, como si intentaras levantar al perro con tu puño. Esto está diseñado para ejercer presión sobre el diafragma, lo que debería ayudar a expulsar el objeto que causa la obstrucción de las vías respiratorias.
- Repite si es necesario: Si el primer intento no logras desalojar el objeto, repite la maniobra varias veces.
- Verifica la boca del perro: Después de cada serie de compresiones, verifica si el objeto se ha movido hacia la boca, donde podría ser más fácil de retirar. Si puedes ver el objeto claramente sin riesgo de ser mordido, intenta retirarlo con los dedos.
- Busca atención veterinaria: Incluso si logras desalojar el objeto y tu perro parece estar bien, es crucial buscar atención veterinaria inmediata para asegurarse de que no hay lesiones internas o complicaciones.
Cómo realizar la reanimación cardiopulmonar en un perro paso a paso
Realizar la reanimación cardiopulmonar (RCP) en un perro implica una serie de pasos cuidadosos para ayudar a recuperar la respiración y la circulación.
Por favor, sigue los pasos minuciosamente, en caso de emergencia:
- Verifica la conciencia del perro:
- No pierdas tiempo si ves que el perro no está respirando.
- Si no está consciente, llama al perro por su nombre o toca suavemente para ver si hay alguna respuesta.
- Abrir la vía aérea:
- Coloca al perro de lado derecho y abre su boca para verificar si hay algún objeto bloqueando la vía aérea.
- Si encuentras un objeto, retíralo con cuidado.
- Comprueba la respiración:
- Observa si hay movimiento en el pecho o escucha/ siente el aliento en su nariz o boca.
- Si no respira, cierra la boca del perro y realiza dos respiraciones de rescate en su nariz.
- Buscar el pulso:
- Puedes buscar el pulso en el muslo interno, donde la pierna se une al cuerpo, o si sabes cómo encontrarlo, en la zona donde el codo toca el pecho mientras el perro está de lado.
- Comienza compresiones torácicas:
- Si no hay pulso, inicia las compresiones torácicas.
- La posición de las compresiones varía ligeramente dependiendo del tamaño del perro:
- Perros grandes: Coloca tus manos una encima de la otra sobre el punto más ancho del pecho.
- Perros pequeños y cachorros: Utiliza una mano o los dedos para comprimir el pecho.
- Realiza las compresiones:
- Aplica las compresiones con firmeza y rapidez, a un ritmo de 100-120 compresiones por minuto.
- El pecho debe volver a su posición normal entre cada compresión.
- Respiración de rescate:
- Después de 30 compresiones, da dos respiraciones de rescate.
- Asegúrate de que el pecho del perro se eleve con cada respiración.
- Continua el ciclo:
- Continúa con ciclos de 30 compresiones y dos respiraciones de rescate.
- Revisa periódicamente si hay respiración o pulso y si el perro vuelve en sí.
- Busca atención veterinaria:
- Incluso si el perro reacciona, es vital llevarlo al veterinario inmediatamente.
- Si no hay respuesta después de 10 minutos, es poco probable que la RCP tenga éxito.
Consideraciones importantes:
- La RCP puede causar lesiones, incluso costillas rotas, por lo que solo debe realizarse si es absolutamente necesario.
- La RCP en perros es similar a la de los humanos, pero adaptada al tamaño y anatomía de los perros.
- Es recomendable recibir entrenamiento de un profesional para realizar correctamente la RCP.
La práctica de estos pasos puede ser crucial en una emergencia como la de atragantamiento en perros, pero la mejor preparación incluye un entrenamiento práctico, que a menudo se ofrece en cursos de primeros auxilios para mascotas.
Conclusión sobre el atragantamiento en perros
El atragantamiento en perros es una emergencia que requiere una respuesta rápida y eficaz.
Aunque no ocurre con extrema frecuencia, estar preparado y conocer las medidas preventivas puede marcar la diferencia.
La supervisión durante las comidas y el juego, así como la selección cuidadosa de juguetes y alimentos, son clave para prevenir estos incidentes.
En caso de atragantamiento, mantener la calma y seguir los pasos adecuados puede salvar la vida de tu mascota.
Recuerda que después de cualquier incidente de atragantamiento, es fundamental una visita al veterinario para asegurar el bienestar de tu perro.
